Es bien sabido que la familia real se rige por protocolos o tradiciones estrictas creadas hace muchos años; de hecho, una de estas obliga al príncipe William y a Kate Middleton a comer por separado en Navidad.
Las celebraciones navideñas en la residencia de Sandringham funcionan en base a un estricto itinerario que establece el tiempo específico para cada actividad durante las festividades. Es por eso que se creó la tradición de que los hombres y las mujeres desayunen en habitaciones separadas antes de los eventos del 25 de diciembre, con la intención de que no exista algún contratiempo marital.
Aunque esta tradición fue iniciada por el rey Eduardo VII hace muchos años, ha sido tan efectiva que al día de hoy sigue vigente; sin embargo, esta regla impide que la pareja real favorita de los simpatizantes de la realeza desayune junta como lo hacen a menudo, lo cual es un poco triste para ellos.
Incluso para los más expertos en la familia Windsor, esta regla suele ser muy extremista, sobre todo si tomas en cuenta que los tiempos ya han cambiado y que para algunas familias el desayuno de la mañana de Navidad puede ser un momento muy lindo, en especial para los Gales. Es por eso que se piensa que, tan pronto como ascienda al trono, pondrá fin a esta tradición.