Según recientes informes, el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle habrían comprado una casa nueva de vacaciones en Europa, teniendo la oportunidad de tener una propiedad en el antiguo continente después de que el rey Carlos III los echara de su antiguo hogar en el Reino Unido, Frogmore Cottage.
El medio Page Six fue el encargado de confirmar que el duque y la duquesa de Sussex adquirieron una nueva propiedad en algún lugar de Portugal, donde los parientes cercanos de Harry, la princesa Eugenia y su esposo, quienes también poseen una gran finca al norte de la ciudad de Lisboa.
Tal parece que esta nueva compra podría ser una estrategia que la exactriz se trae entre manos, pues quiere solicitar una Visa Dorada, lo que le permitiría a Meghan Markle como ciudadana estadounidense acceder a los 26 países Schengen en Europa, los cuales incluyen a España, Grecia y España, sin ningún tipo de restricción.