Para nadie es un secreto que la realeza goza de lujos y cosas que para muchos no serían más que fantasiosos sueños, y aunque Rose Hanbury y su esposo David Rocksavage tengan en título de marqueses y pertenezcan a la aristocracia, sigue sin ser un título real, y sus hijos, aunque son solo unos niños, no significa que no lleven una magnífica vida de lujos.
Iniciamos dando un vistazo a la gran mansión en la que reside la familia Cholmondeley, una casa de ensueño que incluso Kate Moss declaró al ‘Financial Time‘ que pensó que había fallecido y llegado al cielo tras ver la propiedad por primera vez, y no estaba exagerando, la casa tiene una historia de más de 300 años, y que los marqueses no han dudado en remodelar a su gusto.
Aunque los hijos de la pareja, Alexander Hugh George Cholmondeley, Lord Oliver Timothy George Cholmondeley y la menor de los tres, Lady Iris Cholmondeley, cuentan con una habitación privada para cada uno para hacer lo que se les plazca en ella, Rose Hanbury reveló en ‘The English Home‘ que a los pequeños les encanta jugar por toda la casa, incluso pasan mucho tiempo en la galería principal, el cual usan como pista para patinar y jugar con el monopatín sin preocupación alguna, definitivamente una magnífica vida que cualquier niño desearía tener.