El príncipe Harry no habría recibido de muy buena manera la orden de desalojo de su residencia real en el Reino Unido, la cual fue ejecutada en junio del 2023 por órdenes de su padre, el rey Carlos III, quien consideró que su hijo ya no debería tener un alojamiento en su país natal.
Según ha reportado Tom Quinn en el diario inglés ‘Mirror’, el duque de Sussex se enfureció y llegó a las lágrimas cuando se enteró que lo iban a desalojar de su residencia en el Frogmore Cottage.
Harry junto a su esposa Meghan Markle, dejaron a un lado sus deberes reales a inicios del año 2020, con el fin de mudarse e establecerse en los Estados Unidos. Esta iniciativa fue la excusa perfecta para que el Jefe de Estado, decidiera tres años después quitarles su residencia.
“Harry estaba profundamente furioso y llorando por haber sido desalojado de Frogmore; sentía que su padre no tenía derecho a hacerlo y que era puramente vengativo por las decisiones que anteriormente había tomado”, aseguró Tom Quinn para el citado medio.
Actualmente, y a un año de la orden de desalojo del Frogmore Cottage, el príncipe Harry ha confirmado que no vivirá más en el Reino Unido, ya que recientemente concretó a los Estados Unidos como su nueva residencia permanente.