Recientemente, la duquesa de York, Sarah Ferguson, está en la mira de muchos medios luego de que supuestamente fue señalada de visitar en una ocasión la casa de Jeffrey Epstein, con su ahora exmarido, el príncipe Andrés, en la propiedad privada de uno de los traficantes sexuales de niños más grandes en Palm Beach en Florida, esto según algunos documentos publicados el pasado viernes.
Un exempleado de la residencia Epstein nombro al duque y a la duquesa de York en una declaración grabada en el año 2009, donde también se incluían documentos relacionados con la demanda de la cómplice de Jeffrey, Virginia Giuffre, contra la amante del agente financiero, Ghislaine Maxwell.
En una importante conversación que se encontraba en dichos documentos entre la abogada Katherine Ezell y Maxwell, se dio a evidenciar que Sarah Ferguson y su exmarido eran amigos de Jeffrey, y que ambos estuvieron en su isla tan solo una vez, al mismo tiempo en que se revelaba que ambos miembros de la realeza británica pasaron la noche allí y que incluso el príncipe Andrés recibió un ‘masaje’ la noche que paso en ese lugar.
Tras esta información, el palacio de Buckingham y los abogados de los duques de York no han respondido a los múltiples ataques y presiones de los medios ante esta información; sin embargo, se espera que pronto ambos salgan a dar sus declaraciones al respecto, ya que esto podría dar paso a que ambos fueron partícipes de todas las atrocidades que se vivían en dicha isla privada
