Anteriormente, Ariana Grande había sido objetivo de fuertes habladurías, rumores que destacaban principalmente el «radical» cambio físico que había sufrido la cantante, en donde cientos de miles de sus fanáticos se mencionaron por las redes sociales para demostrar su preocupación por el estado de salud de la cantante, sin embargo, la intérprete declaró que no estaba enferma y negó tener algún trastorno alimenticio y ha asegurado que se siente saludable y feliz.
Tras el estreno de Wicked, Ariana Grande ha vuelto a suscitar la preocupación por su aspecto físico luego de que una nueva comparación de una fotografía reciente suya en uno de los eventos de la película y una antigua foto, se hicieran virales en la red social de X, «¿Qué le pasó a Ariana Grande?».
«Ella ha perdido mucho peso», «se ve terrible», «Parece que estuviera enferma. Mental o físicamente, no estoy seguro, pero no es solo el envejecimiento», «espero que ella esté bien, ¡Nunca se sabe por lo que está pasando alguien!», fueron algunas de las reacciones ante la nueva imagen de la cantante.