Selena Gomez abrió su corazón en una entrevista reciente con la revista “Elle”, donde reflexionó sobre los desafíos de crecer bajo los reflectores. La cantante, que comenzó su carrera siendo una niña, confesó que la fama temprana le impidió desarrollar un sentido sólido de sí misma durante los veinte, dejando claro que la presión de la fama puede ser abrumadora y causar daños duraderos si no se gestiona adecuadamente.
Gómez, quien comenzó a actuar en la serie infantil “Barney y sus amigos” a los 10 años y alcanzó fama mundial con la serie “Los Hechiceros de Waverly Place”, reconoce el agradecimiento que siente por su familia y las oportunidades que ha tenido.
Sin embargo, también admite que la presión de ser una estrella infantil ha afectado significativamente su desarrollo personal.
“No me arrepiento, tengo una familia fantástica y mis padres establecieron reglas y estoy agradecida por eso”, explicó a Elle. “Sin embargo, no creo que lo hubiera hecho muy joven si estuviera pensando en mí ahora”. dice, confesando que su temprana fama la hizo sentir “atrofiada“.
“Agregar mucha presión por parte de mucha gente no me ayudó a desarrollar un sentido de identidad… Fue una época muy difícil. Vivo con esto todos los días”.
La estrella del pop admitió que intenta mirar el vaso medio lleno y concentrarse en los proyectos que ama: “Hago lo mejor que puedo para mantenerme positiva sobre todo y concentrarme en cosas como esta que realmente me hacen feliz”, dijo sobre su nueva película, “Emilia Pérez”.
“Pero yo diría que tal vez esperen y tengan un poco de vida”, dijo finalmente, aconsejando a los niños que quieren ser famosos a temprana edad. A pesar de las dificultades, Gómez demuestra una actitud positiva y resiliente. La cantante, también conocida por su franqueza sobre sus luchas con la salud física y mental, fue diagnosticada con trastorno bipolar y lupus.