La película de Donald Trump que el magnate intentó censurar en Estados Unidos

Antes de que Donald Trump volviera a ser elegido presidente de los Estados Unidos, el empresario y político multimillonario temía que una película de bajo presupuesto le hiciera dar una mala imagen. El filme en cuestión fue “The Apprentice”, presentado en el Festival de Cannes en mayo.

Poco después de la proyección, el equipo de campaña de Donald Trump emprendió acciones legales para intentar detener la distribución de la película en Estados Unidos. Pero no pudo censurar el filme, así que se siguió distribuyendo sin ningún problema.

¿Por qué te molestó tanto a Donald Trump “The Apprentice”? La película retrata la juventud de Donald Trump en las décadas de 1970 y 1980 y su relación con su mentor Roy Cohn, con quien prefiere no estar asociado desde que su amigo contrajo y murió de VIH.

Escrita por Gabriel Sherman y dirigida por Ali Abbasi, la película pretende deconstruir la imagen imponente construida por el republicano a lo largo de décadas.

“Roy Cohn, un abogado famoso por representar a jefes de la mafia, enseñó a Trump sus ‘reglas de victoria’ antes de ser traicionado por su propio protegido. Regla #1: ataque. Regla #2: negarlo todo. Regla #3: Nunca admitas la derrota. Mientras Cohn utilizó estas reglas para ganar batallas legales, Trump las utilizó para impulsar su propia narrativa”, afirma el productor de la película, Dan Bekerman, en una columna publicada en Deadline.

En una escena de la película, Roy Cohn lleva a Donald Trump a ver sus cintas secretas, llenas de grabaciones de funcionarios poderosos en situaciones comprometedoras. La existencia de las grabaciones llevó a cada uno a hacer exactamente lo que quería.

“Nuestra película desmantela la imagen imponente que Trump hace de sí mismo mostrando los orígenes de su mística y poder”, afirma el productor. En la película, el papel de Donald Trump recae en el actor Sebastian Stan. El actor Jeremy Strong (ganador del Emmy por “Succession”) interpreta a Roy Cohn, el hombre que le enseñó todo a Trump.

Posteriormente, el empresario utilizó las “reglas” contra Strong: negando cualquier relación entre ambos. El equipo de Donald Trump no pudieron censurarla y la película se estrenó el 11 de octubre en 1.700 salas de Estados Unidos.

Pero, al tratarse de una producción independiente de bajo presupuesto, no tuvo una gran inversión en publicidad y fue devorada en cartelera por otros estrenos. La película ha recaudado 3,9 millones de dólares en taquilla en Estados Unidos y 10,7 millones de dólares en todo el mundo.