En este 15 de octubre, el príncipe William se unió a los miembros de la Fundación NFL en Kennington Park, para ayudar a abordar algunos de los desafíos que enfrentan los jóvenes en algunas zonas más desfavorecidas del Reino Unido, donde en medio de su conversación e interacción con los invitados, el príncipe de Gales dejó caer una pequeña broma dirigida a sus tres hijos, los príncipes George y Louis y su hija Charlotte.
Luego de que el primogénito del rey Carlos III impresionara a los jugadores profesionales con sus lanzamientos y esfuerzos en el campo, el príncipe William no pudo resistirse a hacer un comentario descarado sobre sus habilidades deportivas.
Por supuesto, los miembros de la Fundación NFL le dieron tres pelotas pequeñas de futbol americano para que William llevara para sus tres hijos de 11, 9 y 6 años respectivamente, así como también una de tamaño normal para él, que al recibirlas dijo entre risas: «Practicaré un poco con los pequeños en casa y veré cuantas ventanas podemos romper«.