La reina Letizia a lo largo de su vida ha sido una de las mujeres mejores vestidas de la realeza española, pero así mismo una de las que constantemente se hace cambios de looks en el cabello que dejan sin palabras a muchos por lo bien que se ve, y lo acorde que le puede resultar cualquier cambio. Por ello, aquí te dejamos 6 veces, de las tantas, en que la monarca ha impactado con su look.
Su ‘falso’ corte Bob:
La reina logró que las miradas se centrarán en ella en el año 2019, cuando salió con su cabello muy corto, por lo cual todos pensaron que se había cortado el cabello. Aunque la primera impresión fue esa, después se pudo evidenciar que había seguido un truco con el cual su cabello parecía tener el corte Bob.
Más rubia que nunca:
La reina Letizia de España en el año 2005 lució uno de los looks más rubios que ha tenido, con su cabello casi completo con mechas monas en diferentes aclarados, y luciendo su cabellera suelta simplemente con una raya a la mitad.
Muy romántica:
La monarca española tiene claro que su cabello ondulado es un gran peinado con el que deslumbra en muchos eventos. Aunque actualmente no se le ve con este tipo de peinados, en sus años más joven era común verla con una parte de su cabello recogido y la otra parte con ondas muy marcadas con un estilo muy romántico.
Su look más llamativo:
La reina en un evento de Premios Mariano de Cavia en el 2016 llamó la atención, siendo una de las más buscadas del momento debido a su peinado. Aunque su vestido de lentejuelas de Nina Ricci fue muy nombrado, Letizia lució más atrevida que nunca con su melena peinada hacia atrás y sostenida en la parte superior.
Más elegante que nunca:
La reina Letizia con este look pudo lograr muchos comentarios positivos, pues lograba verse muy elegante, como toda una Reina. Se trataba de un llamativo recogido con ondas estilo barroco, que usó en la boda de Federico y Mary de Dinamarca el 14 de mayo de 2004, dónde se presentó como la prometida del heredero a la corona española.
Su melena larga y abundante:
El 2023, sin duda, fue un año en donde la reina Letizia optó por mantener su cabello un poco más largo de lo normal y además abundante. Esto llamaba mucho la atención, pues además tenía su pelo con mucho brillo y parecía muy bien hidratado, lo que demuestra que cuidaba mucho de una rutina capilar.