El rey Carlos III ha intentado desesperadamente demostrar al pueblo británico que puede gobernar la monarquía incluso desde su propia cama. Sin embargo, la sobrecarga de deberes reales podría ser contraproducente para la monarquía en ascenso del actual rey del Reino Unido.
El pasado 29 de agosto, el palacio de Buckingham decidió otorgarle un papel real clave a la princesa Ana en medio de las complicaciones de Carlos III. El palacio anunció que la princesa Ana representará al rey en los eventos que se llevarán a cabo en los Países Bajos el próximo 21 y 22 de septiembre para conmemorar el aniversario número 80 de la batalla de Arnhem.
Afortunadamente, el rey Carlos III dio en el clavo con su decisión, ya que su hermana Ana es uno de los miembros más queridos de la familia real. Además, la princesa también es conocida por ser la miembro más trabajadora de los royals, por lo que no habrá ninguna preocupación sobre su desempeño el próximo mes.