El hijo de Kate Middleton y el príncipe William, el príncipe George, después de su padre estará listo para convertirse en el próximo heredero de la Corona Británica, un hecho que le permitirá tener varias atribuciones a su favor, entre esas el hecho de que podrá heredar una propiedad privada reconocida como una zona muy fiestera.
En 1337, el príncipe Eduardo III estableció una propiedad privada conocida como el Ducado de Cornualles, que abarca unas 135.000 hectáreas de tierra repartidas en 20 condados. Estas tierras con las que el príncipe buscaba brindar independencia a su hijo y heredero, también se establecieron como una regla, con la finalidad de que cada futuro duque de Cornualles, es decir el hijo mayor superviviente del monarca británico, tuviera la posibilidad de tenerlo, lo que significa que será algún día propiedad del príncipe George, cuando su padre se convierta en Rey.
El Ducado de Cornualles tiene algunas zonas famosas y reconocidas por ser uno de los principales destinos del Reino Unido para despedidas de solteros y solteras, lo que dejaría claro que en el futuro podría ser una zona mucho más fiestera de lo que es ahora, pues en estos momentos, en los meses de verano su población aumenta de 22.000 a más de 100.000 personas.