El príncipe Andrés es sin duda una de las figuras reales que más afectó el nombre de la corona británica, y es que la gran polémica que causó por el escándalo de Jeffrey Epstein, no solo resonó en el Reino Unido, sino también en el mundo entero, misma razón por la que fue obligado a dimitir de sus responsabilidades con la realeza, y ahora, su hermano, el rey Carlos III, al parecer ya no tiene más paciencia para él.
Según el medio Daily Mail, el rey Carlos lleva bastante tiempo intentando que el príncipe Andrés abandone la mansión de los Windsor, la gran y lujosa mansión de 30 habitaciones valuada en 30 millones de libras esterlinas, la Royal Lodge. Por lo que el monarca habría amenazado con romper todo lazo con el príncipe Andrés si no lo hace.
El diario citó una supuesta fuente cercana al rey, quien habría declarado a The Times lo siguiente: “Desgraciadamente, si Andrés se niega a salir de allí en un plazo razonable, el monarca podría verse obligado a reconsiderar el apoyo financiero que le brinda, por lo que el duque tendría que comenzar costearse la seguridad, alojamiento y su estilo de vida, algo que es muy probable que no dure mucho. Todos se preocupan por su bienestar y por sus intereses, pero la paciencia y tolerancia tienen un límite“.
Dando a entender que la necedad del príncipe Andrés de salir de la Royal Lodge para trasladarse Frogmore Cottage, habría obligado a su hermano a tomar medidas drásticas.