El controversial influencer británico Oli London ahora está viendo las consecuencias de las cirugías estéticas que se hizo para parecerse a Jimin, integrante de la agrupación surcoreana de kpop BTS. El joven ahora luce un rostro sumamente deformado, Dada las cicatrices que le han quedado a raíz de los numerosos procedimientos estéticos que han dañado su cara.
Todo empezó con un viaje a Corea del Sur en el año 2014. A partir de ahí, empezó a mostrar una obsesión por el kpop, especialmente en el Idol Jimin, con el que incluso se propuso la meta de parecerse lo más posible a él.
Oli empezó a someterse a una serie de cirugías, desde cirugía ocular hasta liposucción y operaciones en la mandíbula y la nariz, con el objetivo de replicar la apariencia del famoso artista. Sin embargo, cada procedimiento dejaba cicatrices y problemas que requerían atención especializada.
Además, su participación en programas de televisión y su presencia en redes sociales, lo convirtieron en objeto de atención mediática. Esto le generaron un aluvión de críticas y debates sobre sus decisiones, las cuales siguen siendo consideradas sumamente controversiales y obsesivas por parte de los fans de Bangtan.
Al día de hoy, Oli London experimenta las terribles consecuencias de sus cirugías estéticas para querer parecerse a Jimin de BTS. Las huellas del bisturí ahora quedarán en su cara de forma permanente, y sin ningún tipo de posibilidades de eliminarlas al menos en un futuro cercano. Incluso, actualmente utiliza aceites y cremas faciales con el fin de ocultar las cicatrices y otras deformidades que quedaron tras todas las cirugías a las que se sometió