La Princesa Leonor se ha ganado una gran popularidad en el último año, y no solo por su innegable carisma, sino también por su gran compromiso y audacia con la corona española, cualidades dignas de la futura reina de España, y en su última aparición pública causó suma intriga con su increíble porte militar.
El pasado 21 de mayo, la hereda al trono español fue la principal estrella del Palacio de la Aljafería de Zaragoza, lugar donde recibió la medalla de las cortes de Aragón, y el nombre de hija adoptiva de Zaragoza, impresionantes títulos que solo la hija del rey Felipe VI podría obtener, sin embargo, lo que más captó la atención de los fanáticos fueron sus vestimentas repletas de honoríficos significados.
Como por ejemplo, los cordones de color rojo de su uniforme militar, que según dicta la tradición española, resaltan el estado civil de su portador, así es, en el caso de la princesa, significa que no tiene una pareja actualmente y por eso los lleva desatados, en caso de haber contado con un acompañante sentimental, sería correcto lucirlos atados.