La Familia Real Británica está enfrentando duras críticas nuevamente, al conocerse que una destacada agencia fotográfica había dictaminado que una foto de la monarquía británica, específicamente una que se habría tomado en el bautizo del príncipe Archie, habría sido alterada de manera digital.
Lo mismo ocurrió con el caso de una imagen de la princesa de Gales, Kate Middleton, quien ‘posó’ con sus tres pequeños hijos con el fin de poner fin a las especulaciones sobre su salud, sin saber que todo terminaría mal, pues ella misma admitió que esta había sido modificada digitalmente.
Aunque el fotógrafo negó estas afirmaciones y expresó fuertes palabras debido a la sugerencia ‘falsa’; y además, no está totalmente claro cuáles son los motivos que llevaron a la agencia a desestimar la imagen, lo cierto es que de alguna manera genera un nuevo conflicto para la realeza, y nuevamente la hace perder credibilidad en torno al pueblo británico.