El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle se encuentran en Canadá con motivo de un evento de los Invictus Games que creo el propio duque de Sussex. Sin embargo, esto no les ha impedido celebrar el día de San Valentín, que cae justo en el momento en el que el rey Carlos III ha sido diagnosticado con cáncer.
Los duques de Sussex han pasado el San Valentín lejos de casa. El matrimonio ha asistido al campo de entrenamiento de invierno «One Year to Go» este 14 de febrero.
Pero el día especial para los Sussex no terminó ahí, ya que la cuenta de X (Twitter) llamada «meghansclosetchronicles» compartió la noticia de que a la pareja se les captó entrando a un reconocido restaurante italiano de la ciudad de Vancouver.
Allí, la pareja tuvo una velada en donde sus pequeños hijos Archie y Lilibet no estuvieron presentes, creando así una ocasión única y especialmente hechas para ellos dos.