El Rey Carlos III del Reino Unido ha sufrido un nuevo ataque, luego de que un grupo de activistas climáticos dañara un retrato del monarca como un claro símbolo de rebelión y rechazo, pese a su gran labor filantrópica y sus aportes a la lucha contra la contaminación ambiental.
En medio de un nivel de apoyo mixto y confuso, el Rey Carlos III sufre otro ataque contra su imagen, luego de que un retrato de él, ubicado en la Galería Nacional de Retratos de la ciudad de Edimburgo en Escocia, fue vandalizado el día de hoy con pintura en aerosol, por parte de dos activistas climáticos de la organización This is Rigged.
Ben Taylor, uno de los miembros de This is Rigged le dijo al diario británico Daily Mail lo siguiente:
“¿Por qué el Gobierno escocés cree que es aceptable seguir permitiendo que sigan adelante nuevos proyectos de petróleo y gas sin siquiera oponerse a ellos? Si queremos un futuro para nuestros jóvenes, deben oponerse a todas las nuevas licencias de petróleo y gas”.
This is Rigged ha estado participando en una considerable marcha de acciones diseñadas para atacar a los principales proveedores de combustible en Escocia con bloqueos y otras actividades.