Recientemente, el Reino Unido se enfrenta a una crisis que no se veía en el país desde hace muchos años, y el rey Carlos III se ha visto muy beneficiado debido a esto, los alquileres están aumentando en todo el país, y como ya sabemos, el monarca es dueño y beneficiario de una gran cantidad de propiedades, en lo que va del año ha recibido por lo menos unos 30 millones de dólares solo de su catálogo inmobiliario.
Debido a los problemas financieros que atraviesa el país, muchas personas se han visto afectadas por la escasez de productos y ahora, por la inminente subida de los precios de alquiler, cientos de pequeñas empresas también se verán afectadas, pero no todos sufren, puesto que esto beneficia a quienes son dueños de propiedades en renta, justo como el rey Carlos III, quien cuenta con una enorme cartera inmobiliaria.
El vasto imperio inmobiliario de Carlos, o mejor conocido como el Ducado de Lancaster, produjo unas utilidades de 26,2 millones de libras, lo que equivale a unos 34,3 millones de dólares. Este patrimonio pasó a manos del monarca cuando su madre, la reina Isabel II, murió el otoño pasado. El bien inmueble, de un poco más de 18.000 hectáreas, iguala prácticamente en tamaño a Washington D. C. y genera millones de dólares anuales por concepto de renta.
Para su buena suerte, también está exento de pago de impuestos, no como la mayoría de las demás empresas, quienes sí deben declarar por todas las propiedades en renta. Recordemos que el rey Carlos paga un impuesto voluntario más no obligatorio. Muchos ciudadanos republicanos del país anglosajón han estado luchando para que esto cambie, y dicen que por más rey que sea, debe seguir las leyes económicas del Reino Unido, al igual que todos los que viven en él.