Hace muy pocas horas se ha conocido que Sarah Ferguson, la duquesa de York, tuvo que ser intervenida debido a un grave cáncer que le fue diagnosticado, y el cual ponía en un inminente riesgo la salud de la duquesa.
Un portavoz allegado a la duquesa ha confirmado que Sarah de 63 años, había tenido que someterse a una cirugía casi de emergencia y empezar un tratamiento con el fin de salvaguardar su salud.
En declaraciones difundidas por el canal de televisión británico Sky News, un portavoz de la exesposa del príncipe Andrés aseguró que la duquesa fue diagnosticada con cáncer de pecho, en uno de los exámenes de rutina que se practicaba. Para fortuna de Sarah Ferguson, ella fue diagnosticada cuando el cáncer estaba en una etapa temprana, posible de operar.
Por lo que fue rápidamente intervenida según lo expresó la fuente: “Se le recomendó someterse a una cirugía pronta, y así lo ha hecho de forma exitosa“. De igual forma se explicó que: “La duquesa ahora esta recibiendo el cuidado médico necesario y sus doctores le han manifestado que el pronóstico es bueno, por lo que se esta recuperando con su familia“.
Según la misma fuente, Sarah Ferguson esta profundamente agradecida con los mensajes de apoyo de sus seguidores, y con el trabajo del personal médico: “Sarah quiere expresar el agradecimiento al personal médico que le realizó la operación y le dio un diagnóstico temprano, ya que no presentaba síntomas, por lo que cree que su experiencia pone en manifestación la necesidad de estos exámenes de manera regular“.