La Reina Letizia de España, ha dejado atrás a la casa real española tras la llegada de su suegro, el Rey emérito Juan Carlos I, mientras también se ha distanciado de su esposo, el Rey Felipe VI. Las razones, es que la monarca no quiere ser vinculada en ningúna de las polémicas que existen entre su esposo y algunos de sus familiares, por lo que no está dispuesto a compartir el mismo techo con ellos.
Aunque no hay bases esclarecidas para poder explicar el por qué el viaje del Rey emérito Juan Carlos no es del agrado de Letizia, lo que si se ha logrado saber, es que la reina ha dejado Zarzuela tras la inminente llegada de su suegro.
Desde hace varios años, se supo que el Rey emérito tenía algunos problemas que le impedían volver a España desde su residencia en Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, y para sorpresa de la realeza, el ex monarca ha decidido regresar.
Enterados por los medios, Felipe y Letizia quedaron realmente sorprendidos ante la noticia del viaje. Tanto así, que la reina se molestó aún más con su esposo, por no ejecutar una acción que impidiera el viaje.
No obstante, Felipe VI ahora ha decidido viajar a Malaga por primera vez para reunirse con las cinco maestranzas españolas. En el discurso que dió el jefe de estado, se ha reivindicado la “lealtad a la Corona” en el momento en el que Don Juan Carlos consuma su deriva hacia la independencia de la institución.
“Habéis sido ejemplo de lealtad a la Corona y de servicio a España, mostrando una gran capacidad de adaptación ante las distintas etapas históricas”, ha dicho Don Felipe a los maestrantes para después afirmar que han demostrado “una lealtad ejemplar”, acotó el Rey.
No obstante, los problemas internos de la corona española crecen, por lo que la Reina Letizia no ha dudado en dejar al Palacio real mientras que el Rey Felipe VI se fué de viaje. Ella no quiere hacerse responsable de la llegada de su suegro, por lo que no estaría dispuesta a atenderlo.