El estreno de ‘The Amazing Spider-Man 3’ quedó fijado para mayo de 2016. Garfield iba a volver a dar vida a Peter Parker y James Webb repetiría tras las cámaras. Además, ya había planes para una cuarta entrega, aunque Webb ya había dejado claro que no contasen con él para dirigirla. En paralelo a todo eso, Sony trabajaba en crear un universo siguiendo la estela de Marvel, valiéndose para ello de Los Seis Siniestros
Una de las razones más nombradas del descarte de Andrew Garfield como Spiderman estuvieron motivados por el hecho de que el funcionamiento en taquilla de ‘The Amazing Spider-Man 2’ había sido peor de lo esperado, Sony empezó retrasando el estreno de la tercera entrega hasta 2018. Durante meses apenas hubo novedades, con la excepción de unas declaraciones de Garfield señalando dónde había fallado la segunda entrega:
Lo siguiente que se supo fue que Sony anunciaba en febrero de 2015 que cancelaba ‘The Amazing Spider-Man 3′ y que había llegado a un acuerdo con Marvel para compartir al personaje. Obviamente, hubo varios movimientos para que eso se concretara, el más llamativo quizá fue que se llegó a barajar la posibilidad de que el Spider-Man de Garfield pasase a formar parte del MCU, una idea que se descartó con rapidez.
Hubo que esperar para conocer la reacción de Garfield ante lo sucedido, pero no dudó en afirmar que el fracaso de su Spider-Man le había roto el corazón:
Algo que ocurrió con esa experiencia, para mí, es que en realidad la historia y el personaje no estaban en lo alto de la lista de prioridades, al final. Y eso me pareció muy, muy complicado. Firmé para servir a la historia, y para servir a este increíble personaje del que me he disfrazado desde que tenía tres años, y entonces hay que hacer concesiones y te rompe el corazón. Me dejó un poco desconsolado, hasta cierto punto. No del todo. Comentó Andrew Garfield en una entrevista.
Para entonces, Sony y Marvel ya habían fichado a Tom Holland para sucederle en el papel de Spider-Man, aunque un tiempo después descubrimos varios alucinantes detalles sobre cómo habría sido la tercera aventura encabezada por Holland.
Creo que lo que pasó fue que, si tienes algo que funciona como bloque y empiezas a quitar partes, se rompe el hilo conductor, y es difícil volver a recuperar el tono de la historia. Algunas personas del estudio tenían problemas con ciertos tramos y ellos tienen la última palabra.