La pérdida física de Mac Miller dejó al mundo sin palabras hace más de una semana cuando medios estadounidenses reportaron que, por culpa de una sobredosis en una fiesta, partió a otro plano terrenal.
De inmediato la prensa comenzó a publicar que el rapero tenía depresión y que el abuso de sustancias ilícitas se intensificó cuando su relación con Ariana Grande llegó a su fin, por lo que fans -de Miller- y haters -de Grande- la responsabilizaron de lo ocurrido.
La artista no se había pronunciado más allá de una foto de Mac que subió a su Instagram sin ninguna descripción, pero finalmente abrió un poco -públicamente- su corazón:
“Te adoré desde el día en que te conocí cuando tenía 19 años y siempre lo haré. No puedo creer que ya no estés aquí. Realmente no puedo entenderlo. Hemos hablado de esto tantas veces. Estoy tan enfadada, tan triste que no sé qué hacer. Fuiste mi mejor amigo. Durante tanto tiempo. Por encima de todo lo demás. Tenías el alma más amable y dulce, atormentada por demonios que nunca te mereciste. Espero que te encuentres bien ahora. Descansa”.